EstherChiquiEsther y Chiqui, Chiqui Pérez y Esther Ovejero. Bastante tiempo trabajando entre las dos en el mundo de la música. Algunos discos, giras de importancia, viajes, algunas actuaciones de renombre y una realidad siempre constante: la poca unión entre un colectivo como el de los músicos. Para este mínimo común denominador han resuelto una receta muy sencilla ¡vamos a reunirnos! Será el próximo día 19 en el Ateneo de La Laguna, en Tenerife, y también en el ‘Salón Dorado’ del Gabinete Literario de Las Palmas de Gran Canaria a partir de las 18.00 horas.

Tienen previsto, incluso, la fusión de ambas citas a través de videoconferencia, para que haya una conexión importante entre ambos grupos. Están invitados todos los músicos, de cualquier estilo y condición. El objetivo se marca en hacer de la de músico una profesión como otra. Para ello hará falta mucha conjunción, mucho debate, mucha mezcla y al final recoger todas las conclusiones. Todo parece cuestión de tiempo.

– Esther y Chiqui, hoy vamos a hablar de algo que no tiene que ver con lo que es estrictamente sus facetas musicales ¿Cómo surgió la necesidad de la reunión de músicos convocada?

– Esther Ovejero: Bueno, en principio surgió a partir de una de las tantas quejas que vamos dejando los músicos en los foros. Se fueron añadiendo comentarios y comentarios, la cosa se fue caldeando y al final se habló de una urgente necesidad de reunirnos y hablar todos de los múltiples problemas con los que nos estamos encontrando.

– Ovejero, ¿ha detectado a algunos músicos que son más de foro de internet que reunirse de manera constructiva para encontrar soluciones…?

– E.O.: No creo que sea una tendencia exclusivamente de los músicos, creo que la sociedad en general utiliza los foros como un medio de descargar un poco sus frustraciones, pero luego hace poco. En mi opinión los foros son solo un primer paso para algo más grande y una reunión creo que es un buen comienzo.

– Por hacer un esfuerzo en la síntesis ¿Cuáles son las dificultades con las que se encuentran los músicos en este momento concreto de crisis en todos los factores económicos?

– E.O.: Desde mi punto de vista, es un problema que va más allá de la crisis, es un problema de décadas ya. La profesión de músico como tal no existe, no está regulada y a partir de ahí surgen infinidad de problemas.

– Chiqui Pérez: Además de la falta de lugares para realizar tu actividad, para tocar. Se producen proyectos que se supone que además cuentan con ayudas -miserables, por ciero- y luego no tienen mercado, ni se pueden desarrollar, ni promocionar. Me sumo a lo que señalaba Esther, sobre que es una profesión desregularizada. A veces parece que es todo un misterio que genera dinero y medallas a la administración, dinero a quienes programan o graban y editan los trabajos de los músicos que son los verdaderos creadores; medallas a las Administraciones Públicas. Además de todo esto muchos compañeros con edad, o con problemas graves de salud no pueden acogerse a nada, no tienen ni pensiones ni otro tipo de derechos, viven en absoluto abandono y miseria. Quiero añadir que no creo que ningún músico viva de subvenciones, es más, te diría que seguramente la mayoría estaría dispuesto a renunciar a ellas a cambio de posibilidad de trabajar, de desarrollar su profesión, de cotizar y sentirse cubierto y seguro, como cualquier profesional. Por eso la mayoría, hemos tenido que alternar nuestra actividad con otras, los que tenemos más suerte, cercana a la música, pero hay muchos músicos que se han tenido que resolver de muy diversas maneras.

– Existe un extraño velo de duda con respecto a las subvenciones, hay algunos ‘posts’ en internet que apuntan a extrañas manos negras que las manejan pero sin embargo, es un procedimiento limpio ¿No?

– E.O.: Quizá Chiqui esté mejor informada respecto a eso. Yo puedo decir que es un jurado externo a Canarias el que determina la valía o no de un proyecto para recibir una subvención. Lo que sí tengo claro, es que no somos los músicos los que las concedemos y que eso no debe servir de excusa para criticar y tratar de hundir esta necesidad de unidad. Si por el simple hecho de que a uno le hayan concedido una subvención ya va a ser criticado y acusado de tener algún tipo de interés…¡apaga y vámonos! Si existen ‘manos negras’, que yo no lo sé, para eso es la reunión, para poder llegar, entre todos a encontrar una manera equitativa de resolver el problema de las subvenciones. Y tampoco creo que aceptar una subvención sea algo indigno o parecido a robar. Están ahí, para todos, que haya que modificar los criterios a la hora de concederlas es una cosa y las acusaciones de este tipo otra muy diferente. Además no somos los músicos los que ponemos esas bases.

– C.P.: En primer lugar, para que o bien un cantante, un músico o un grupo pueda acceder a este tipo de concertación tiene que hacerlo a través de una empresa. En segundo lugar, debes presentar una maqueta, cierto que hoy día no es complicado grabar una maqueta casera y que quede bien pero aún así hay quien no puede y por ello pide ayudas. Lo tercero, por enumerarlo de alguna manera, el orden no atiende a calidades de importancia, es el hecho de que te sumas a un montón de solicitudes de ayuda junto con otros cantantes, músicos o grupos de diferente ‘calibre’ y entiéndanme bien, me refiero a que ahí entramos todos, los que ya vienen desde años desarrollando su trabajo hasta alguien como mi hija, es un decir, un ejemplo de alguien no profesional, que se reúne con sus colegas y monta su maqueta y desea grabar su primer proyecto pero ¿Cómo se compite? es complicado, un saco sin fondo, de cerca de, no recuerdo, pero quizás trescientos proyectos. Además de otras muchas cosas. El tema es extenso, las bases habría que revisarlas. Cuando por fin accedes a recibir la ayuda, si resultas seleccionado, tienes que hacer un disco en el que no puedes pagar el trabajo de los músicos de la manera que correspondería, el artista que recibe la ayuda, por supuesto, no ve un euro.

– Precisamente esas calidades, como las llama Chiqui, esas diferencias ¿No están contempladas suficientemente a la hora de repartir una subvención?

– C. P.: No, rotundamente. Las calidades que contemplan son de estilos, algo así como ‘músicas del mundo’, ‘jazz’, no sé , así. Yo hablo de calidades de importancia de estos puntos que enumero, no de calidades de los proyectos ¡ojo!

– E.O.: Es que en la música el criterio es siempre subjetivo. A la hora de dar una subvención (habría que mirar las bases), pero se contemplan elementos como si tienen que ver con Canarias, si se graba en un estudio de aquí y con una compañía de las islas, si hay mujeres, si es comercial. Esos criterios son bastante vagos. En mi opinión ¿cómo se sabe si algo va a ser comercial o no? Yo considero que la música de calidad no nace comercial, se convierte en comercial a través de los medios, y muchos de esos trabajos que reciben subvenciones no encuentran una difusión apropiada. Se valora mucho también la preservación del folclore y eso no beneficia a los proyectos innovadores. Habría quizá que replantear estas bases desde otros criterios. Aunque estoy de acuerdo con Chiqui en que las subvenciones son mínimas y que valdría mucho más la pena que se destinase dinero a la creación de un circuito donde se cobrara con facturas y altas en la SS y que nos diera trabajo para poder financiarnos nuestras maquetas o discos o lo que fuera. Me gustaría añadir, que en el foro de Canarias Música, uno de los días más ‘duros’, por ponerle un adjetivo, alguien contrario a la reunión dijo una frase del tipo: ‘Yo nunca he recibido una subvención, tengo las manos limpias’. Y tampoco creo que aceptar una subvención sea algo indigno o parecido a robar. Están ahí, para todos, que haya que modificar los criterios a la hora de concederlas es una cosa y las acusaciones de este tipo otra muy diferente. Además no somos los músicos los que ponemos esas bases.

– C.P.: No sé si en el resto del mundo, pero en Canarias ocurre que cuando alguien se mueve, recibe un tiro. Hay compañeros que saben mover, vender bien su trabajo, otros somos muy malos como agentes comerciales y no sabemos hacerlo, no puedo criticar aquello que no soy capaz de hacer, no tengo más que admirarlo y aprender a hacerlo, ¿no creen?

– Intentando ser constructivos, ¿Cuáles pasos son los adecuados a partir de ahora? ¿Qué esperan de la reunión? ¿Tienen confirmada la presencia de las diferentes susceptibilidades al respecto?

– C. P.: primero que nada se demanda información, muchos no tenemos toda la información, y podemos conocer los problemas y objetivos de cada uno, informarnos de lo que no sabemos. Acercamiento e intercambio de opiniones, estos son mis principales objetivos para la reunión del lunes.

– E.O.: Estoy de acuerdo con Chiqui sobre la información que siempre es necesaria y añado que sinceramente espero que se planteen un montón de cosas, que se den ideas y que se redacte un documento que se pueda llevar a los políticos oportunos para que, sabiendo lo que nos ocurre, se pueda hacer algo. Quizá no baste una reunión, y hagan falta unas cuantas, pero este es un buen comienzo.

– C.P.: una reunión no será suficiente y todos lo sabemos, pero puede ser un punto de inicio interesante. Muchos no van a poder asistir por la hora, es difícil encontrar un momento ideal para todos, eso es una lástima porque hay mucha gente con mucho interés por asistir y mucha necesidad de acercamiento. El sector de músicos que tocan en hoteles va a quedarse sin la opción, por lo que sería bueno idear un plan para informar a la gente que no pueda asistir el lunes.

– Otra de las cosas curiosas de la reunión es que va a haber otra paralela en Las Palmas de Gran Canaria ¿Cómo tienen prevista la conexión y coordinación con lo que suceda en la Isla redonda?

– C.P.: Eso es todo un reto.

– E.O.: Bueno, se ha planteado la opción de una videoconferencia. Aún queda decidir si esta se hará durante toda la reunión o si solamente se dedicará la última hora.

– En ocasiones parece que la sociedad se dirige a los creadores e intérpretes musicales y les dice ‘ustedes no son una profesión’ ¿Creen que esto podrá cambiar alguna vez?

– E.O.: Pues en eso estamos. La música es un bien necesario, y para que podamos disfrutarla también es necesario que se valore el trabajo de las personas que se dedican a ella. Además, sectores como el turístico necesitan de los músicos, pero las condiciones que se ofrecen en los hoteles y salas en la actualidad están muy por debajo de lo que se ofrecía hace 10 o 20 años. se debe considerar al músico como un profesional que dedica tiempo y esfuerzo a una tarea y se debe remunerar no solo atendiendo a las horas que se muestra en el escenario, sino a las horas de ensayo, de arreglos, de selección de repertorio, o incluso de elaboración de espectáculos y de creación. Pero para que esto ocurra, también nosotros debemos poner nuestro grano de arena, más allá de un foro de facebook.

– C.P.: Mi opinión es que hay que creérselo, uno mismo debe creer que lo que hace es un trabajo profesional y demandar el tratamiento que le corresponde, eso es lo que hacemos, pedir el tratamiento que le corresponde a los profesionales de la música. Requiere formación, inversión -en equipo e instrumentos-, horas de ensayo, de mantenimiento -trabajo personal con el instrumento-, etcétera.

– Sin entrar en detalles, se puede decir que tanto Chiqui como Esther tienen una respetable trayectoria en esto de la música, una importante discográfica. Dada la situación actual ¿Están arrepentidas de ser músico?

– E.O.: Yo no pero a veces me replanteo si debería buscarme un trabajo ‘normalito’ porque esto de la música tiene demasiados altos y bajos. Arrepentida para nada. Es más, espero que la cosa cambie.

– C.P.: Para nada, pero yo, por ejemplo te digo que soy madre y profesora de música de una cantidad importante de niños en un colegio de primaria, igual resulta que deciden dedicarse a ello, y ojalá puedan hacerlo en diferentes condiciones que nosotros. Lo que ocurre es que estoy encantada con la música, pero nunca he podido ser una profesional de la música en el sentido de que mi profesión no existe como tal. Yo me lo planteé a tiempo, menos mal, hay que hacerlo o echar el resto a tope, yo tenía una hija, no podía hacerlo o más bien, elegí buscar una alternativa.

– ¿Qué dirían a un músico que está indeciso en relación a venir o no a la reunión del próximo lunes?

– E.O.: Les diría que en la reunión va a recibir mucha información que puede interesarle y que sobre todo su asistencia servirá para que la gente se entere de que no somos cuatro pelagatos los que estamos hartos de esta situación, sino que somos muchos. También le diría que todos tenemos ideas y que todos tenemos algo que aportar. Quedarse en casa, no va a cambiar nada, y quejarse con los colegas de profesión, mucho menos.

– C.P.: Que debe hacerlo, debe venir, al menos a romper mitos, o a verificarlos, pero ‘face to face’, cara a cara. En principio, a mostrarse y a hacerse escuchar.