Fotografía perteneciente a la sesión realizada para el primer disco de Melissa Aldana

Fotografía perteneciente a la sesión realizada para el primer disco de Melissa Aldana

Melissa Aldana, la joven sensación del saxo, viene por primera vez a Tenerife, a Canarias. Actuará en el Lago Martiánez del Puerto de la Cruz, con Samuel Labrador trío de telonero y con el pianista Polo Ortí de invitado el próximo día 10 de marzo de 2011 a partir de las 20.30 horas con entrada gratuita, con el patrocinio del Gobierno de Canarias. Esta chilena afincada en New York, de 22 años, ha dejado boquiabierto a todo aquel, crítica o público, que se para a escucharla. No hay quien no la haya visto en vivo y no se haya quedado prendado de su ataque, de su decisión a la hora de seleccionar la nota adecuada y de sus excelentes composiciones.

Ha robado el corazón del mundo del jazz y no hay noche que no despliegue sus sones y mida metales con gente de la valía más que contrastada de Roy Hargrove, en la ciudad de los rascacielos. Estudió en Berklee, Boston, y eso le abrió de par en par unas tremendas posibilidades a nivel laboral, musical y discográfico. Muy bien acogido ha sido el éxito de su disco debut ‘Free fall’ y ya prepara para fines de este año su nuevo retoño. Ahora vuelve a España en un gira que la va a llevar por escenarios de Málaga (con The Fringe), Tenerife, Gran Canaria, Madrid ¿A qué esperas para disfrutar de su hacer?

– ¿Se encuentra en New York en estos momentos?

– Melissa Aldana: Sí me encuentro en New York

– ¿Lleva bastante tiempo en la ciudad que nunca duerme?

– M.A.: Sí, un año y New York y en Norteamérica unos cuatro años. Desde 2007.

– ¿Cuándo descubrió el instrumento? ¿Cómo decidió el hecho de hacerse saxofonista?

– M.A.: Yo vengo de una familia de músicos de jazz muy importante en Chile, los Aldana. Kiko Aldana, mi abuelo, fue fundador de una de las bandas ‘de tropical’ más importantes de los años 50 que se llamaba la Orquesta Huambaly. El tocaba el tenor y el barítono. Después vino mi padre, Marcos Aldana, tuvo en un evento muy conocido el ‘Thelonious Monk Jazz Competition’ en USA. Ha recibido y realizado muchas clases y muchos tours, también toca el saxo como yo. El impartía unas clases y necesitaba un saxofonista. Yo tenía 6 años. Como era muy pequeñita él no le daba mucha importancia. Al final me llamó y me dijo ‘mira Melissa toca estas tres notas’. Toqué tres notas en el saxo alto y desde entonces me enamoré y nunca he parado de tocar el instrumento.

– Por lo tanto, siempre lo tuvo claro…

– M.A.: Siempre me ha gustado el saxo. Cambié al tenor cuando tenía 14 años.

– ¿Qué tal en la prestigiosa escuela Berklee School of Music de Boston?

– M.A.: Todo empezó cuando en el 2006 el saxofonista Wayne Shorter viajó a Santiago de Chile con Danilo Pérez. Yo más o menos tenía la idea de quien era Danilo ya que está casado con una muy buena amiga de mi padre, que fue su alumna de saxo. Me acerqué a Shorter y le dije que si me podía escuchar y si podíamos tocar juntos. Desde entonces estuve en contacto con él. Fue quien me abrió las puertas para poder hacer la audición en Boston y en New England School of Music. Después de la audición tuve el placer de ganarme la primera beca Presidencial Norteamericana. Esta beca te cubría todos los años de estudio, la casa, la comida. Eso me facilitó el hecho de poder viajar a Boston y vivir allá.

– ¿Fue una tremenda experiencia vital?

– M.A.: Berklee me lo dio todo. Hice muchos contactos que después me han servido para desarrollar mi carrera. Todavía hoy conservo amistades con gente de mi misma edad y más jóvenes o más viejos que están con el mismo sueño, con las mismas ganas de aprender. Fue una experiencia muy muy positiva.

– Dejando a parte su familia… ¿Qué saxofonistas le han influido? ¿De los músicos de la tradición norteamericana tiene algunos referentes claros?

– M.A.: Como empecé con alto siempre estuve muy relacionada con Charlie Parker, Julian ‘Cannonball’ Adderley, Paul Desmond, Phil Woods. Cuando me cambié a tenor fue porque escuché por primera vez a Sonny Rollins. Me enamoré completamente del sonido del instrumento y empecé a escuchar a otro tipo de gente. No podían faltar Dexter Gordon, Michael Brecker, Lucky Thompson, George Coleman, Joe Henderson, y tantos otros. La lista es interminable. Hoy en día también hay muchos músicos increíbles. En la escena de New York hay mucha gente de mucha valía como es el caso de Kurt Rosenwinkel, bordeando los cuarenta años, Mark Turner. Mucha influencia latinoamericana, mucha gente de Israel, de España, músicos increíbles que han supuesto influencia en mí pero no son necesariamente de Estados Unidos.

– Recibió clases de George Coleman ¿Cómo surgió esa posibilidad? ¿Qué sensaciones le dejó?

– M.A.: Todo surgió porque en Boston me hice amiga de un reparador de saxos, un luthier de Maine, Emilio Layos. Es como el reparador de saxos más famoso de la historia del jazz. Era muy amigo de Stan Getz, por ejemplo. Antes de mudarme a New York le dije, Emilio por favor, preséntame a George Coleman. Yo sabía que él lo conocía y le dije que quería tomar clases con este maestro. Emilio lo llama por teléfono y me pide, por esa vía, que tocase una balada. Lo hago y a George le encantó. Cuando llegué a NY lo llamé y desde entonces hemos sido muy cercanos, he tomado clases de él. En Youtube hay algunos videos de nosotros tocando. Nunca he tenido un profesor tan alucinante. Tocar con un master del jazz siempre es constructivo. Está tan curtido que para mí fue una experiencia muy enriquecedora.

– Nos ha sorprendido a todos la calidad de tu CD ‘Free Fall’ grabado a fines del pasado año 2010, ¿Cómo sucedió esta circunstancia?

– M.A.: Todo pasó en Berklee con uno de mis profesores, Greg Osby. Osby abrió un sello discográfico ‘Inner circle’. El me ofreció grabarlo ahí. Seguidamente conocí a Jorge Núñez, de Madrid, España, mi manager, que produjo el disco también. Con esta gente alrededor mío tuve la posibilidad de que financiaran el proyecto, incluí algunos temas míos y del pianista Michael Palma, de Texas. También en el disco se encuentra Ralph Peterson Jr., que fue uno de mis profesores en Berklee, se trata de un batería de jazz muy conocido en ciertos ambientes, ha tocado con Michael Brecker y John Scofield. El disco viene por una experiencia personal de estos últimos tres años de mi vida, de cómo me he sentido. Me mudé a Boston sin tener la posibilidad económica de poder sobrevivir por mi propia inercia. Sin saber muy bien lo que iba a pasar, si iba a tocar, si iba a aprender el idioma ya que no hablaba nada de inglés. Todo ha ido dándose de una manera muy mágica y con mucho esfuerzo. Por eso fue una caída libre, libre pero positiva.

– Toca con gente como Gary Burton de quien fue telonero en su concierto en el Blue Note de NYC ¿Quiere decir que a pesar de que su carrera es de caída libre es también, de alguna manera, controlada?

– M.A.: El concierto con Gary Burton fue una emoción muy grande. Supuso un sueño cumplido de muchos años. También confirma el hecho de que si uno se encierra a estudiar y hace las cosas bien se puede hacer las cosas que uno desea. Amo tocar, amo estudiar, ser lo mejor que se pueda con mi instrumento, conocer a gente buena y si haces eso las cosas llegan. Haber tocado ahí fue una inspiración bastante bueno…

– ¿Cómo fue el contacto con el público en España en la gira que tuvo a fines del año 2010? Ahora vuelve a España, en marzo, con conciertos en Málaga, Tenerife, Gran Canaria y Madrid, ¿Qué espera de esta nueva gira?

– M.A.: España es uno de mis sitios preferidos para tocar. La gente es muy atenta, muy agradable, me da una energía muy positiva. Y en verano, si es posible también me gustaría volver a los festivales. Todo esto se ha realizado también por mi Manager, Jorge, que vive en España y ha sido la persona que lo ha hecho posible. El creyó en mí, me ayudó. Hemos he estado hasta ahora tocando en pequeños clubes de jazz pero para mi será un placer enorme estar en Festivales en Canarias, o en Vitoria, Getxo etc… Me encantaría estar en esos festivales de jazz más grandes.

– ¿Cómo es una noche normal de Melissa Aldana en New York City? ¿Es de locos elegir una actuación en dónde tocar o disfrutar como público en la Gran Manzana?

– M.A.: (risas) De verdad es que es de locos, la pregunta es la que me hago cada noche ¿Qué hago? ¿A dónde voy? En una ciudad como esta hay muchas que hacer. Es lo que más me gusta de la ciudad que haya tantas actuaciones atractivas. Hay un montón de locales en donde puedes ir a ver conciertos de jazz o de cualquier estilo de calidad. También puedes ir a un show en Brodway. Puedes ir a ver por ejemplo, al guitarrista Kurt Rosenwinkel en el Village o a George Coleman en Smoke, mucha gente en el Smalls, de calidad. Para los músicos en sí también es muy positivo ya que les dan ganas de tocar. Puedes hacerlo todos los días. Tanto en conciertos como en jam sessions. Hay varias jams pero sobretodo en Fat Cats o en Smalls. Hay cuatro grupos todas las noches, el último grupo comienza a la 1 de la mañana y puede abrir una jam session. Puedes encontrarte al mismo Kurt, o a Roy Hargrove. Puedes ver como tocan y se comportan. Lo recomiendo para un músico y para cualquier tipo de gente.

– Entrar en una jam con esos nombres debe de ser, valga el símil, como entrar en las Grandes Ligas, estamos señalando a nombres capitales del panorama actual… ¿Qué tal en ese ambiente? ¿Como te sientes metiendo baza con tu saxo?

– M.A.: Es tan positivo. Se abre a cualquier tipo de gente y eso es lo bueno. Está abierta a cualquier tipo de nivel. Es para todo el mundo. Si quieres tocar puedes y si no pues no. También es una oportunidad de ver un concierto gratis. Esto te ayuda a encontrarte y a seguir creciendo como músico.

– Hace unos meses tuve el placer de entrevistar al Director Artístico de la Vanguard Jazz Orchestra Dick Oatts. Él nos señaló que lleva mucho tiempo en esto y seguía con la ilusión de cuando tenía tu edad, Melissa (22 años) ¿Cómo se ve Melissa con la edad de Oatts, dentro de 30 años?

– M.A.: Yo creo que sí, tendré la misma ilusión. Comparto escenario, como te digo, con gente de todas las edades y sienten la misma emoción que yo, pasan también por las mismas depresiones, por las mismas soledades, somos todos humanos y en realidad es muy interesante comprobar como un músico siempre va a ser el mismo. Siempre está la emoción de escribir, conocer nuevos músicos. La vigencia sigue viva en ti.

– ¿Qué se encuentra alguien que se acerque a un directo de Melissa Aldana como el que se va a llevar a cabo en el Lago Martiánez (Puerto de la Cruz, Tenerife, entrada gratuita) el próximo día 10 de marzo?

– M.A. Mi formación puede ser de dos formas, básicamente, con Colin Stranahan (Batería, Kurt Rosenwinkel), o Joseph Lepore (bajista de Greg Osby) o como es el caso de mi viaje a Tenerife con Ross Peterson y Pablo Menares con el contrabajo. Es mi concepto de trío de saxo, batería y contrabajo, ahora he dejado el piano alejado. También es posible encontrarme con Gordon Au, trompetista. Toco canciones mías o standards, baladas. Ya que me interesa estar en contacto con lo que es la tradición y recordar esa parte de la historia. Yo creo que estoy descubriéndome, investigando, es una forma de ver a un músico joven, investigando. Creo que a la gente le va a llamar la atención las nuevas composiciones. Las diferentes ideas, somos de diferentes países y eso a la gente le va a gustar.

– ¿Cual es su formación favorita?

– M.A.: Me encanta a trío. Es un desafío para mí captar la atención de los espectadores con saxo, batería y bajo. Siento que me abre mucho más mi mente y mis expectativas de qué quiero hacer con la música. Me ha gustado tanto que es como quiero grabar también mi próximo disco. En realidad me encanta tocar con todo tipo de formato, piano, guitarra.

-Habrá tiempo de hablar de nuevos proyectos discográficos pero ¿tiene ya planes de realizar su segundo disco?

– M.A.: Tengo la idea precisamente de hacer un trío con algunos invitados especiales en la trompeta y en la guitarra. Esperemos que a fines de este 2011 pueda grabar el nuevo disco, entre este año y el próximo (risas).

– Mande, para finalizar, un saludo a los lectores de creativacanaria.com

– M.A.: Un saludo gigante de Melissa Aldana desde New York, espero verlos a todos en mi concierto en el Lago Martiánez el próximo día 10 de marzo. Presentar mi proyecto allá es un placer. Pueden visitar www.melissaaldana.com