El proyecto Cultura con Derecho(s) culmina la segunda etapa de su investigación sobre los muros invisibles en la isla de Fuerteventura, cuyos resultados se mostrarán en la Casa de los Coroneles, durante la segunda semana de noviembre. Esta iniciativa, proyecto cultural de la consultora Crowplan, ha investigado las desigualdades entre hombres y mujeres que, desde la época de mayor poder de los coroneles, perduran aún hoy. Son los comportamientos, a veces hasta tiránicos, que todavía pueden encontrarse en la política y sociedad de una isla como Fuerteventura, pero que pueden ser extrapolables a cualquier parte del mundo en la que aún no se haya conseguido la igualdad plena entre hombres y mujeres. Debido a que las mujeres de Fuerteventura estuvieron durante mucho tiempo excluidas de la política o de cualquier rol de liderazgo, hoy todavía vemos muy pocas mujeres en la política o que ocupen cargos importantes. Aunque los muros hayan sido derribados, debido a que las mujeres están conectadas con quienes los construyeron, todavía enfrentan problemas por los restos invisibles de esas barreras que aún siguen existiendo bajo capas a veces impenetrables de siglos de construcción social.
Esta iniciativa, que cuenta con el apoyo del Instituto Canario de Desarrollo Cultural (ICDC) ha estudiado las historias de algunas mujeres fuertes que fueron capaces de romper sus muros. Afortunadamente, en estos días, ya en el siglo XXI, la política y sociedad de Fuerteventura está haciendo permitiendo incluir a las jóvenes y mujeres por igual en todas las facetas de la sociedad.
Crowplan, consultora fundada hace apenas 3 años, en julio de 2018, destaca por la mezcla de disciplinas aparentemente muy diferentes entre sí y con pocos puntos en común, sobre las que se ha especializado: las problemáticas públicas y privadas ligadas al derecho, la cultura, la arquitectura, el urbanismo y el patrimonio cultural, especialmente en territorios insulares (islas, archipiélagos) y zonas costeras. La consultora se ocupa de los Derechos de la cultura, de los artistas, y en especial de los Arquitectos y de los artistas, y entre esos derechos, se encuentra su objetivo de acelerar la llegada a la igualdad plena entre hombres y mujeres.
En un sector económico como el cultural, que crea en Canarias tantos puestos de trabajo como el agrícola, pero recibe la mitad de las ayudas públicas que el plátano o el tomate, se da por sentada la igualdad. Pero la realidad es que cada vez que una investigación profundiza en el estudio cualitativo y cuantitativo de cómo va avanzando la igualdad, nos damos cuenta de que dicha igualdad plena no existe, siquiera, en el sector cultural existe.
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