Algunas películas recuperadas pertenecen al que fuera cineasta y actor Martin Moreno

El municipio de Ingenio se convertirá del 16 al 18 de septiembre en la próxima estación de paso de la campaña de rescate de materiales fílmicos, que desde hace más de una década emprendió la Consejería de Cultura del Cabildo de Gran Canaria, con la finalidad de recuperar la memoria audiovisual en peligro de extinción de la isla.

Cada vez resta menos para perder definitivamente la batalla contra el tiempo, la principal amenaza del sinfín de viejas fotografías y películas que a buen seguro cientos de ciudadanos y ciudadanas de la isla aún custodian cariñosamente en los baúles del recuerdo de sus domicilios. La propia UNESCO fue la primera en percatarse demasiado tarde al instaurar, tan solo hace 14 años, el Día Mundial del Patrimonio Audiovisual, con la intención de concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de tomar medidas urgentes y reconocer la importancia de los documentos audiovisuales como parte consustancial e integrante de las distintas identidades nacionales.

Más allá de la bondadosa intención de esta iniciativa impulsada por el citado organismo de las Naciones Unidas, los especialistas ya nos han advertido de la celeridad con la que hay que actuar, porque sólo disponemos entre diez y quince años para transferir urgentemente las grabaciones audiovisuales disponibles a soportes digitales y evitar su pérdida. Hay que recordar que los documentos audiovisuales, tales como las películas, los programas radiales y televisivos, las grabaciones sonoras y de vídeo, contienen los registros principales de la memoria de Canarias durante los siglos XX y XXI.

Lamentablemente, gran parte de ese patrimonio audiovisual insular ya se ha perdido irremediablemente a causa de la destrucción, el deterioro por el paso de tiempo o la falta de interés y recursos de sus propietarios para su adecuado mantenimiento. Estos materiales, por muy familiares que sea, constituyen un documento de primer orden para identificar multitud de aspectos de nuestra historia reciente.

El Cabildo, a través de su centro Gran Canaria Espacio Digital, lleva tiempo coordinando la campaña denominada ‘Comparte tus recuerdos’, orientada a personas interesadas en rescatar y ceder sus grabaciones audiovisuales rodadas en formato 8 mm, Súper 8 mm o 16 mm, y que deseen contribuir así a la recuperación del patrimonio audiovisual de Gran Canaria.

Un millar de películas

Con esta iniciativa los técnicos especialistas pertenecientes tanto al mencionado centro como de la Fundación para la Etnografía y Desarrollo de la Artesanía Canaria (FEDAC) del Cabildo, vienen digitalizando, documentando y catalogando numerosos fondos particulares de distinta naturaleza con la finalidad de poner en valor su uso cultural por el conjunto de la ciudadanía. Entre otras muchas acciones, José Artiles, restaurador cinematográfico y diplomado en Cinematografía y Artes Visuales, así como Juan José Mendy Igoa, quien ha restaurado cientos de títulos, entre ellos ‘La hija del mestre’, han sido dos de los técnicos que han venido explicando en el marco de esta campaña desde el año 2014, cómo se procede a la compleja restauración de una película de nuestros abuelos.

Desde entonces se han digitalizado un total de 1.051 películas, la gran mayoría de Súper 8 mm (513), 8 mm (440), formato digital (94) y 16 mm (4), recuperadas en los municipios de Agüimes (96), Santa Lucía de Tirajana (43), Agaete (100), Santa María de Guía (172), Teror (90), Valleseco (3), Arucas (53), Valsequillo (107) y Las Palmas de Gran Canaria (329).

Un conjunto de esas joyas recuperadas en 2015 las constituye en fondo del doctor y cineasta aficionado Juan Alonso Castellano, cuyas películas en color y rodadas en súper 8 fueron rodadas en las década de los 60, 70 y 80. Entre ellas figuran desde emotivas imágenes familiares a la elección de Miss España en la que fue elegida Fela Roque, pasando por escenas de la Semana Santa en Vegueta, peculiares corridas de toros en Gran Canaria, la explosión del Teneguía en La Palma o visiones de un desconocido Roque Nublo.

Los técnicos entienden que la difusión de estos documentos audiovisuales no solo supone una manera palpable de preservar la memoria audiovisual de Gran Canaria, sino que con los mismos se puede constatar la transformación social, urbanística, cultural, paisajística y económica que ha experimentado la isla con el paso de las últimas décadas. Como explica Gabriel Betancor, técnico de Fondos Audiovisuales de la FEDAC del Cabildo, “documentos audiovisuales todos ellos con un alto valor histórico y etnográfico pues nos desvelan cómo ha sido nuestra sociedad y nos dan las claves para entender cómo es hoy”.

Según Betancor esta iniciativa del Cabildo pretende desde hace años “poner en valor los documentos audiovisuales de carácter patrimonial de la Isla para evitar que continúen deteriorándose y se pierdan definitivamente. Además, estamos trabajando para conseguir que aquellos que se encuentran en colecciones y archivos europeos depositen una copia en Gran Canaria. Ofrecemos una carta de servicios a la sociedad para que los ciudadanos puedan saber a dónde dirigirse para poner a salvo sus colecciones fotográficas y de documentos audiovisuales con valor patrimonial”.

En colaboración con la ULPGC, a través de la Biblioteca Universitaria que gestiona el repositorio Memoria Digital de Canarias y, especialmente con la FEDAC, que administra un ejemplar archivo fotográfico, el mencionado centro dependiente del área de Cultura del Cabildo ha constituido una unidad de digitalización, telecinando tanto en sus dependencias como en laboratorios profesionales, diversos materiales en formato S8 y 8mm, algunos de ellos muy valiosos para la memoria colectiva de los grancanarios y grancanarias.

Desde el rodaje de acontecimientos familiares o deportivos a fiestas populares, pasando por la actividad cotidiana que nos muestra una imagen en blanco y negro de una isla que empezó a despegar hacia la modernidad con el auge comercial del puerto y la explosión del turismo, los materiales recepcionados en Gran Canaria Espacio Digital siguen un protocolo que se inicia con la inspección física de los mismos, para luego someterse a una fase de limpieza, reparación de empalmes, cotejo de datos de identificación y, finalmente, pasar a ser inventariados con un número de control de registro.

banner facebook creativa