El santacrucero Teatro Victoria acogerá este fin de semana Romnia (No parece flamenco) un espectáculo de Flamenco fusionado con Danza Contemporánea protagonizado por Belén Maya. La pieza será representada el sábado 12 y el domingo 13 a las 20:30, con un precio de 8€.
Hace ahora veinte años se estrenaba Flamenco, de Carlos Saura, una película, indispensable en la filmografía de lo jondo. En ella, el cineasta eligió a Belén Maya como una de las figuras representativas de las nuevas estéticas del flamenco. Belén cautivó al prestigioso director de cine que justificó su elección con una elocuente frase: «no parece flamenco». Belén Maya se convirtió de esta forma en el icono de la vanguardia en la danza flamenca.
En 2014 Belén Maya recibe el Premio de la Crítica en el Festival de Jerez, el más importante del mundo dedicado a la danza flamenca, por su espectáculo Los Invitados. Tras consagrarse como figura de vanguardia, Belén Maya decide seguir explorando nuevos caminos. Nos cuenta Belén que Romnia es una nueva búsqueda, un nuevo interrogante en torno a dos dimensiones de mi ser: mi gitanidad y mi feminidad».
En esta nueva propuesta de Belén Maya, como en los versos de Juan Ramón Jiménez, las alas de la artista arraigan y sus raíces vuelan… Romnia, mujeres, en romanó, es una celebración de la gitanidad, sin victimismos, pero con una mirada a veces compasiva, a veces alegre al infortunio de unas mujeres cuyo coraje para sobrevivir le han llevado a un nuevo compromiso ético y estético. «Romnia son voces de mujeres gitanas no flamencas pero rebosantes de jondura. Mi cuerpo quiere dar vida a esos sonidos negros que llegan de Oriente cargados de penas amasadas por miles de desplazados a lo largo de nuestra historia» expone Belén Maya.
Según el director musical del espectáculo, Joaquín López Bustamante, «En Romnia está presente la biofilia romaní, las duquelas, el frío histórico, el dolor y la alegría del devenir del Pueblo Gitano a través de las mujeres tantas veces discriminadas doblemente: mujeres gitanas que siguen sufriendo, luchando, cantando y bailando».
El Director del espacio Victoria, Roberto Torres, plantea una programación de alto nivel artístico y profesionalidad que enlaza a la perfección con el espíritu de un Teatro Victoria que «apuesta por nuevos lenguajes, en un lugar íntimo, cálido y donde la cercanía entre el espectador y el artista es un valor que va más allá del mero espectáculo».
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