cartelantoniomachin

El Teatro Guiniguada acoge este sábado, 14 de abril a las 20:30 el espectáculo ‘Recordando a Antonio Machín: ayer, hoy y siempre’ con José Manuel Ramos. Con una orquesta inspirada en los años 40, un programa de radio como hilo conductor y la voz de Ramos junto a una cuidada puesta en escena nos invitan a recordar la discografía de esta leyenda cubana con temas como ‘El Manisero’, ‘Piel Canela’, ‘Toda una vida’, ‘Dos gardenias’ o ‘Mira que eres Linda’. Canciones que para todos son entrañables, canciones que van unidas a nuestros recuerdos. Las pocas entradas disponibles se pueden adquirir en www.entrees.es o en la taquilla del teatro gestionado por el Gobierno de Canarias.

Una mesita con una radio antigua junto a un jarrón con dos gardenias, el locutor anuncia el tema que está triunfando en el momento, ‘El Cumbanchero’, interpretado por una orquesta de siete músicos de reconocida trayectoria en Gran Canaria, y dando paso a un programa especial dedicado al amor ‘Ayer, hoy y siempre…’.La publicidad de la época y las cartas de amor a una madre, a un enamorado o a la tierra, ponen la guinda a este espectáculo que hace un recorrido por los temas más entrañables de Antonio Machín, interpretados por la voz de Jose Manuel Ramos y bañados por la luz, la estética y la magia de la época.

Los arreglos musicales de José Carlos Cubas serán interpretados por la voz de Jose Manuel Ramos que estará acompañada por una orquesta de ocho músicos, Diego Martín (flauta y saxo tenor), Julio Suárez (piano), Jorge Soroa(percusión), Javier Ramírez (batería), Daniel Jiménez(maracas), Eduardo Naranjo (saxo alto y tenor), Luis Hernández (trompeta) y Jorge Granados (bajo).

Se cumplen ya más de cuarenta años desde la muerte de Antonio Machín, cubano descendiente de padre gallego, nacido en Sagua la Grande el 8 de febrero de 1903. Este artista no puede ser evocado sin el acompañamiento de las maracas, un instrumento artesanal que según él: «Se hacen de una fruta silvestre llamada güira, que tiene comida dentro y sirve para una tisana. Se vacían, se llenan de arena y se entierran. A los veinte días se les pone un palito, unos perdigones dentro o unos trozos de madera. Yo solo tengo dos, ‘Las abuelas’, como yo las llamo. Las poseo desde hace más de cuarenta años”.Aprendió de su madre, a los cuatro años, la primera canción. Diez años después se producía su aparición pública, en el casino de La Habana y desde entonces sus canciones se dispersan por América Latina y Estados Unidos, París y Londres. A finales de 1939 llega a España donde se asienta para cosechar nuevos éxitos que atravesaron las modas para seguir en el recuerdo y la emoción de varias generaciones.

banner facebook creativa