10445597_10205144009696829_9160295275205350142_nEl pianista Jairo Ortega tiene nuevo retoño y lo ha llamado ‘Romantic Souvenirs’. Se trata de un paseo por el periodo de la música clásica romántica, añadiéndole el porcentaje de improvisación que el cuarteto de músico nacido en Los Realejos pero afincado en Barcelona ha considerado oportuno. De esta manera, aprovechamos este trabajo para escuchar piezas como ‘El lago de los cisnes’, ‘La donna è mobile’ o ‘Barcarole Junio’ fuera de su plano habitual. Efectivamente, disfrutamos de composiciones de Tchaikovsky, Verdi, Beethoven o Chopin en el siempre curioso mundo de la improvisación, del jazz.

A Ortega le acompañan músicos asentados en la escena catalana como Lluís Boronat –clarinete y saxo-, Brady Lynch – contrabajo-, Jordi Herreros –batería- y la participación en el trabajo de Verdi de la voz de Mireia Giró. Al mentado disco también se le añade una composición del mismo Ortega, ‘Laúdano’ y la versión de ‘All of you’, clásico de Cole Porter. ‘Romantic Souvenirs’, con un pie en el pasado y otro en el presente, feliz nueva obra de Jairo Ortega Quartet. Así comenzamos el año 2015.

«La idea (en Romantic Souvenirs) fue rescatar algunas melodías que se han quedado en baúles, en conservatorios y a veces hasta perdidas y darles un nuevo toque, nuestra particular visión. Una nueva oportunidad.»

– ¿Cómo comenzó en la música? ¿Cuáles son los orígenes de Jairo Ortega hasta llegar hasta sus últimas andanzas y publicaciones?

– J.O.: La música me ha venido siempre de familia. Tengo en los míos a pianistas y a vocalistas. Se puede considerar algo así como parte de mi vida y desde mi más tierna infancia no me he separado de ese camino. Comencé estudiando con la familia Ortí en el norte de Tenerife y después con otros como David Goldsmith (en el Puerto de la Cruz). Pocos años después de fallecer el Maestro Goldsmith, me desplacé a Barcelona y ahí estudié piano moderno en el Taller de Musics, continuando mis estudios y culminando mi licenciatura recientemente en Trinity College en Londres.

– Preséntenos sin más dilación su último proyecto ‘Romantic Souvenirs’, recién sacado del horno.

– Jairo Ortega: La idea fue rescatar algunas melodías que se han quedado en baúles, en conservatorios y a veces hasta perdidas y darles un nuevo toque, nuestra particular visión. Una nueva oportunidad.

– ¿Quiénes le acompañan en esta aventura? ¿Quiénes tocan en ‘RS’?

– J.O.: Son mis compañeros de Barcelona, con los que suelo trabajar. Se trata de Lluis Boronat, Brady Lynch y Jordi Herreros. Antes actuaba mucho con el batería canario Ancor Miranda pero por estudios ha tenido que desplazarse a Bélgica, lo ha sustituido Herreros. El resto siguen fieles.

– ¿Cómo surgió la idea de irse a Barcelona y a Cataluña a trabajar?

– J.O.: Hace 13 años que cogí la maleta. Me fui a estudiar a Barcelona y no estoy tampoco desvinculado del todo de Tenerife. Cada cierto tiempo nos gusta traer nuestra música a la isla también. Hemos estado en navidades, por ejemplo.

– ¿Cómo encaja el repertorio de Chopin, Tchaikovsky o Verdi en un disco de improvisación, alojado en el jazz?

– J.O.: Partimos de la base de que esas obras me encantan. Son los que estudiaba cuando estaba con el piano clásico. Con un poco de amor y cariño le damos una nueva oportunidad, en el campo del jazz, blues, bossa. Esos son los lugares que habitamos con este nuevo disco.

– ¿Fue muy difícil seleccionar las obras?

– J.O.: Fue bastante natural. Algunas que probamos no acababan de encajar perfectamente en el trabajo. Otras directamente las dejamos como las hicimos la primera vez. Poco a poco fuimos teniendo el repertorio. También tenemos alguna mía entre todas…

– ¿Una llamada ‘Laúdano’?

– J.O.: Sí, efectivamente. Un medicamento que se tomaban en aquella época. Los despistaba un poco del mundanal ruido.

-¿Qué diferencias hay entre el primer disco que se titulaba ‘Querido Frédéric’, dedicado a Chopin? ¿Fue duro abrirse a más compositores?

– J.O.: No fueron especialmente duros. Hay que reconocer que Chopin tiene una forma de componer bastante especial, particular. Los otros grandes genios también son compañeros de época, y algunos posteriores. Están todos en el mismo barco. Por lo menos yo lo veo así.

– Por primera vez en un disco del cuarteto se incluyó la voz femenina, en este caso la de Mireia Giró ¿Cómo fue esa idea?

– J.O.: Esto lo incluimos a última hora para ser sincero. En principio lo iba a cantar yo mismo, después me eché para atrás y pedimos la colaboración de esta genial cantante. Verdi, como todo el mundo sabe, fue un compositor estupendo para la voz. Entonces en el disco quisimos darle el instrumento por el cual es conocido y reconocido y por el que tanto luchó.

– ¿Al final no cantó usted? ¿Podemos definirlo como vértigo?

– J.O.: (Risas) La verdad es que grabado está. A los chicos les gustó como quedó (más risas).

– ¿Tiene planes para volver a Tenerife en conciertos?

– J.O.: Algo hay para abril. Ya tenemos algunas fechas confirmadas, esperemos que se afiancen.

– ¿Qué proyectos hay en el próximo futuro? ¿Hay planes para nuevos discos?

– J.O.: La verdad es que deseo componer alguna más pero siempre habrá alguna revisión del mundo clásico. Es la senda que nos hemos marcado. Tampoco es que hayamos pensado mucho en el tercer disco ya que ‘Romantic Souvenirs’ es bastante nuevo.