DhaferYoussef1_copiaHoy viernes, 27 de noviembre, a partir de las 20 horas, el Otoño Cultural Fundación CajaCanarias clausura su presente edición, con la celebración del concierto a cargo del músico Dhafer Youssef. El artista tunecino presentará en el Espacio Cultural CajaCanarias de Santa Cruz de Tenerife su último trabajo discográfico hasta la fecha, «Birds Requiem», en un concierto para el que apenan quedas entradas a la venta.

Las últimas localidades pueden adquirirse a través de www.entrees.es o, en caso de disponibilidad, una hora antes del comienzo de la actuación en la taquilla del Espacio Cultural CajaCanarias, al precio de 10 euros (5 euros, menores de 26 años, únicamente en taquilla). La recaudación íntegra del concierto de Dhafer Youssef irá destinada a la Asociación Tinerfeña en Lucha por la Salud Mental (ATELSAM).

Dhafer Youssef es uno de los artistas más carismáticos de Túnez. Educado en la tradición de los cantos sufíes, combina a la perfección el misticismo de la práctica sufí con elementos contemporáneos de la música electrónica y el jazz. Su música invita a viajar a Túnez, Egipto, Irán, Andalucía, el Mediterráneo, y a cualquier lugar inventado, con el sonido de las cuerdas de su laúd. Así, ha conseguido fusionar ingredientes árabes y multiculturales con el jazz y sonidos contemporáneos, acoplando lirismo e intensidad a una de las voces más impresionantes surgidas en este campo musical.

En su concierto en el Otoño Cultural Fundación CajaCanarias, Dhafer Youssef presentará su último trabajo discográfico hasta la fecha, «Birds Requiem» (2013), un trabajo en el que sabe llevar, como nadie, la música árabe y norafricana por el sendero electrónico y del jazz manteniendo la espiritualidad y profundidad que caracteriza a la música islámica. La crítica lo ha definido como un «intérprete que abre su alma y proyecta mil significados de dolor, inspirados por la sabiduría y la espiritualidad de la tradición sufí, resultando una música de tal belleza que se convierte en eterna, intemporal, y podemos imaginarlo tocando en cualquier momento de la historia de los últimos mil años».

Dhafer Youssef: «Tocar ante el público es siempre algo único»

¿Cómo fueron sus comienzos en el mundo de la música? ¿Ha sido duro encontrar su espacio en el panorama internacional?

Bueno, me gusta pensar que nací con este amor por la música. Esta es mi fuente de inspiración más importante. Desde que era un niño, de una u otra forma, siempre hice música y estaba seguro de que eso era lo que quería hacer para el resto de mi vida.

Desde el momento en que descubrí el potencial de mi voz, en que empecé a tocar el laúd, en que vi que podía unirme al coro litúrgico, hasta mi experiencia en el extranjero… Todos estos factores han hecho posible la carrera que he ido construyendo hasta ahora. Por supuesto, la mayor parte de este tiempo ha estado marcado por momentos difíciles y por engaños. Pero esos momentos, junto con las personas que he conocido, han hecho de mí la persona y el músico que soy hoy en día.

He de admitir también que nunca he tenido en mente hacerme un hueco en el panorama internacional. No veo las cosas desde esta perspectiva. Mi objetivo ha sido y es hacer música y producir mi propio sonido mientras disfruto de la vida.

En cierto sentido, Europa se ha convertido en una especie de escuela para su crecimiento musical, especialmente desde que América se ha ido convirtiendo en un país más restrictivo desde los atentados del 11 de septiembre. De hecho, usted eligió vivir en Europa y dejar su residencia en Nueva York. En este panorama, ¿cómo han discurrido las influencias musicales en su música?

Mis raíces son mis orígenes y se reflejan en muchos aspectos de mi sonoridad. El laúd, por ejemplo, capta perfectamente esta raíz y representa esos orígenes y sus sonidos. Este instrumento tan singular me ha permitido transformar la música que tengo en mente en notas, y componer mis propios sonidos.

Por esas fechas, de hecho, fue más fácil viajar a Europa que a América. Mi experiencia europea ha contribuido a desarrollar y a enriquecer mi búsqueda de nuevas sonoridades y se ha plasmado en la diversidad de influencias a través de mis distintos álbumes.

Una vez en Europa, ¿qué influencia tuvo en su música su estancia en Viena y el Club Porgy de Jazz?

La experiencia en Viena abrió mis ojos a un mundo completamente nuevo. Como anécdota, allí fue donde descubrí el piano. Me preguntaron, durante mi corta experiencia académica musical, si sabía tocar este instrumento… En realidad, esa fue la primera vez en mi vida que vi un piano. Desde entonces, me di cuenta de que ese no era el camino que debía seguir y empecé a descubrir nuevos géneros para mí, como el jazz, en el que desde el punto de vista vocal y técnico encuentro espacio para expresarme libremente, lejos del corsé más puramente académico.

Esa ruta que entonces decidí emprender me llevó al Club de Jazz Porgy, donde, entre concierto y concierto, tuve la ocasión de hacer contactos decisivos para mi carrera. Muchos de estos contactos son ahora amigos cercanos. Esta experiencia abrió el camino a todos mis trabajos hasta la fecha. Estas son las experiencias que forman a una persona.

¿De dónde procede su inspiración musical? ¿Qué importancia tienen para usted el misticismo o las raíces coránicas al componer?

En mi infancia, mi abuelo me adentró en los recitales coránicos. Él procedía de una larga tradición familiar de muecines. Mi familia también está arraigada en la tradición sufí. Inevitablemente, esta raíz está presente en mis influencias musicales. Sin embargo, esas raíces no me definen a mí y tampoco a mi música… y no me gusta ser etiquetado como tal.

Me gustan los filósofos como Al Hallej y aprecio los escritos de Abu Nawas, que me han inspirado en mis composiciones, al igual que lo han hecho otros compositores, escritores o géneros musicales como el jazz, rock… Mi universo está formado por una aleación de todos estos elementos.

¿Qué música le ha influenciado a usted más como persona y como intérprete?

La música en general es mi fuente de inspiración, sin limitarse a un género musical particular. Escucho todo tipo de música: jazz, rock, electro… y a artistas como Miles Davis, Thelonius Monk y Ella Fitzgerald, pero también música clásica, género en el que aprecio especialmente a compositores como Bach o Arvo Parts. Absorbo todos esos sonidos y los transformo en sonoridades propias, pero la inspiración no está sólo en la música. Me pueden inspirar encuentros con personas, libros y poetas a los que leo, y también lugares que visito, pues me puede conmover una situación o una atmósfera particular.

Usted ha trabajado con músicos europeos de jazz, especialmente de Escandinavia, pero su último álbum lo ha grabado también con músicos turcos. ¿Representa esto, en cierto sentido, un regreso a sus raíces?

‘Birds Requiem’ es mi álbum más personal. Lo grabé inicialmente en Suecia con trabajo posterior, adicional, en Estambul. Este proyecto reúne a músicos de Turquía, como al clarinetista Hüsnü Senlendirici, al intérprete de kanún Aytaç Dogan, algunos compañeros de carretera de la escena de jazz escandinava, como el trompetista noruego Nils Petter Molvaer y el guitarrista Eivind Aarset… Pero no colaboré con músicos tunecinos en este álbum. Sin embargo, concibo este disco como un regreso a mis raíces y a los orígenes de mi música.

El álbum que he estructurado en torno a la suite ‘Birds Requiem’: ‘Birds Canticum’, ‘Fuga Hirundinum’, ‘Archaic Feathers’ and ‘Whirling Birds Ceremony’ es una culminación de todos mis trabajos previos y estoy deseando presentarlo en directo en Tenerife.

Este será su primer concierto en las Islas Canarias, un archipiélago con raíces africanas y que es muy receptivo a los sonidos africanos. ¿Qué espera del público canario?

Este concierto probablemente tendrá un sabor especial para mí, pues será mi primera vez en Canarias, la primera vez que proyectaré allí mi sonido. De todas formas, tocar para el público, independientemente de su procedencia, es siempre algo único, pues no puedes predecir las reacciones ni falsear la relación entre los músicos y el público del recinto. Esta relación sólo puede ser auténtica y marca el estado de ánimo del concierto. Estoy muy contento por poder llevar a cabo el concierto en Tenerife.

¿Cuáles son sus planes para el futuro? ¿Trabaja ya en su próximo álbum?

Por ahora, sigo con la gira del álbum ‘Birds Requiem’, que estará activa hasta finales del 2015. Pero ya estoy trabajando en algunas composiciones nuevas que tendré el placer de presentar en el futuro inmediato.